dibujo de Franz Kafka
Van a fracturarse, golpe a golpe
con la lasca
puntiforme del hastío,
anhelan la
grieta sangrienta en sus cabezas
pretenden
moler su crianza y su malacrianza,
soltar el
confeti bicolor de lo aprendido.
No se trata
de metanoia, se trata de nihilismo
ellos van a
depurar, están exhaustos de veraneos mentales
excusa que
extiende el gobierno de sus mismas ideas,
en
consecuencia construirán lagunas en sus cerebros
para que
salgan a flote nuevas ideas.
Yo les
recomendaría echarse un misil, como los de Kim Jong-un
directo al
entramado de sus neuronas.
Sea como sea,
estos chicos y chicas
van a
mandarlo todo a la mierda.
Todo:
El saber que
les dejó el gran susto, creer morir
cuando se
expulsaron de un único mundo conocido
a otro
desconocido calentado por el rayo de luz.
El saber que
les dejó el desamparo
cuando en la
primera hora en este mundo lumínico
por algún motivo
no hubo el
calor en sus labios del seno
ni hubo las
gotas invisibles del calostro
descendiendo
por sus pequeñas lenguas,
les
empacharían de leche postiza.
El miedo
construye límites; esos linderos, aprendizaje
miedo de
neonatos, pensar que ahora sí
esta vez sí
ha llegado el final
el final de
la nueva vida
en la pila
bautismal
que al final
nunca los sumergen
pero eso una
criatura nunca lo sabe
menos que le
están haciendo un bien
porque de
saberlo hasta sería agradable
pero que todo
ese ritual era por limpiar una mancha
en el blanco
fantasmagórico del alma
y que con
eso se nace, era insospechado.
Después de
tanto llanto les secaban
para que no
se vea mojada la ropita.
Nacer es un dolor
biológico
vivir es un
dolor social,
el dolor
social, aprendizaje.
A las niñas
las feminizaron atravesándoles
con un hierro
en las orejas
aquel primer
gran estigma
idéntico al
segundo gran estigma, la virginidad,
este último
¿fue un dolor biológico?
¿o fue un
dolor social?
Los límites,
aprendizaje,
en casa no podían
romper nada
no se les
permitía rayar las paredes
debían dejar
el plato de comida vacío
así el estómago
haya estado harto de alimento
no podían comer
en el suelo como animales
debían comer
en el plato con cuchillo y tenedor,
tampoco
podían andar descalzos
tenían nula
capacidad de decir: ya no quiero,
no puedo evitar ensuciarme el morro,
estoy llorando porque no sé hablar,
me hace ilusión rayar esa superficie
vertical (la pared),
no podían y esa angustia, aprendizaje.
Como también
la angustia, el pudor
ellas improvisaban
alternativas
para
esconder la braga mientras jugaban
con los
niños,
el recato es
dolor, aprendizaje.
Perforarse o
tatuarse demandó un gran salto
sobre el
muro paterno y materno
no era fácil,
al final tuvieron que romperlo
y con ello
romper afinidades…
Dios, qué pensarán los Castro, los
Boada
los Azurmendi, dios mío
la abuela de Borja
por dios quita quita.
Así, vestido de esa manera de la puerta no
sales
y si sales no entras
y si no entras no nos quieres.
Pero si haces lo contrario
te quedarás:
Obediencia por amor
Amor a cambio de obediencia
Amor a cambio de subordinación
Alberto Ríos será tu presidente
Por qué te enfadas hijo
No refunfuñes como un torito
No pongas esa cara de perroflauta,
Será tu presidente
Si te quedas, vota por él
Y no por los negratas, ni por los
sudacas
Ni por los gitanos, ni por esos
rumanos,
Ni por esos de Europa del Este
Pero si no quieres votar por él, no
lo hagas
Duela a quien le duela será tu
presidente.
La lasca puntiforme
de la inconformidad
puede ser
que no sea suficiente,
no llegará
tan adentro sin que provoque la muerte.
Hay que
abatir cada neurona comprometida
con esos
saberes: la ética casera, la urbanidad,
entonces
será ineludible sacar el árbol de raíz.
Existen
métodos para ingerir el veneno
directo a
fastidiar esas arquitecturas neuronales
que edifican
el saber:
comer un
brownie de chocolate y cannabis
acompañado
de un refresco frío, una vez por semana,
escuchar
canciones que estimulen el trance y el frenesí, a la vez.
Se podría
intentar un cóctel de lorazepan y Jack Daniel’s
o moler el
lorazepan esnifárselo y beber el Jack on the rock’s,
pero nada de
esto funcionaría si no se hace lo siguiente:
abandonar el
consumo televisión, no por los programas
sino por la publicidad:
dura mucho tiempo y sus transiciones
son muy
rápidas como en el anime
y sus
expresiones son muy falsas como el gemido de un actor porno,
además que nos
intoxican de información persuasiva
infección de
bacteria persuasiva, se llama.
Es capital
parar el consumo de internet
cuyo aire
entre el monitor y los ojos es cadenas
enlazadas
con candados que aprisionan.
La multimedia,
es un pulpo que agarra
de los
miembros, del tronco y de la cabeza
con la boca
succionando la cabeza desde los ojos.
Cuando se
termine el vuelo
llama a la
compañía de telefonía y date de baja
solicita que
se lleven el router lo antes posible
que si se
demoran más de tres días, lo tirarás a la basura
amenázales,
hazles sentir que vas en serio
que el
gestor que te atiende ponga mute
y diga a sus
compañeros, tengo un loco en línea
me dice que tirará el router a la
basura si no lo vamos a ver antes de tres días
todos dirán
manda huevos, que le den por culo, a
la gente se le va la olla…
¡ese es un crack!
Haz caso
omiso, no bajes la mirada
escribe todo
lo acontecido en un cuaderno, repásalo, medita,
crea un esténcil
ve a grabar
las paredes pardas,
ve a grabar
tus camisas viejas, modélalas en el metro
que admiren
tu moda,
compra
zapatos blancos, de oferta
diséñales un
mosaico o un paisaje
una trama
que exprese el significado
que ha
desfilado ante tus ojos.
1 comentario:
Wow
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